La celebración del susodicho Congreso fue proyectada por primera vez en 1916, mediante la Sociedad de Arquitectos de Montevideo; postergado el proyecto hasta 1919, se indicó en ese año, al Gobierno de la República Oriental del Uruguay, la conveniencia de celebrar el Congreso bajo los auspicios de dicho Gobierno. Este, aceptando la sugestión, expidió las correspondientes invitaciones a los demás Estados americanos.
Países representados: Argentina, Bolivia, Brasil, Colombia, Cuba, Chile, Ecuador, Estados Unidos de América. Paraguay, Uruguay.
El Congreso aprobó varias resoluciones relacionadas con los nueve temas de su programa, en las cuales se trató de: embellecimiento de la ciudad típica americana; alojamiento rural; enseñanza de arquitectura en escuelas dedicadas a tal estudio; creación de centros de arte panamericanos para la instrucción de arquitectos en todas las fases de su profesión; materiales de fabricación apropiados para los respectivos países americanos; regulación de la referida profesión; modo de fomentar la cultura artística y la comprensión de la arquitectura; responsabilidad profesional; métodos prácticos para estimular actividades de construcción; un monumento a Rodó.